Hace tiempo, cuando el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se levantó en armas, el criterio de autonomía entre los pueblos indígenas comenzó a cobrar una notoria seriedad y aunque han transcurrido 20 años desde ese suceso, hoy los estados de Chiapas, Oaxaca y Michoacán tienen pueblos que eligen a sus gobernantes bajo sus propios criterios.
En Abril de 2013, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) reconoció la autonomía de Cherán y su posibilidad para defender sus derechos. Este pueblo pertenece al municipio del mismo nombre considerado como una de las principales zonas habitadas por las comunidades purépechas. Más allá de esta riqueza étnica, la peculiaridad de este pueblo ubicado en el centro del estado de Michoacán fue la de haberse levantado en armas en primera instancia contra el crimen organizado.
Aunque en 1990 México firmó el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el que reconocía los derechos colectivos de los indígenas (como el territorio, la consulta, la libre determinación y la autonomía), no se practicaba este acuerdo y la mayoría de las comunidades indígenas formaban parte de municipios donde los partidos políticos (especialmente el PRI) gobernaba bajo criterios totalmente ajenos a la cosmogonía nativa.
Luego de la lucha contra el narcotráfico declarada por el ex Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, el pueblo purépecha de Cherán decidió hacer su propia guardia para terminar con los delincuentes que asesinaban y extorsionaban a sus comunidades.
En una definición histórica, la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró como legal la autonomía de Cherán que les daba el acceso a interponer controversias constitucionales en caso de que alguna decisión a nivel nacional les pareciera contraria a sus derechos.
Entre otras cosas se reconoce que los municipios autónomos indígenas también tienen injerencia en las decisiones que les perjudiquen puesto que son parte del territorio nacional.
Ahora, Cherán cuenta con un Consejo Mayor de Gobierno Comunal integrado por 12 miembros que tienen el mismo nivel jerárquico (no hay Presidente Municipal, ni Ministerio Público). La SCJN determinó que en caso de que se hagan enmiendas constitucionales en su estado, la Asamblea Legislativa deberá consultar primero al Consejo.
Poco a poco las comunidades indígenas organizadas comienzan a ser respetadas en sus modos de vida, aunque el camino aún sigue siendo muy largo y lastimosamente deben existir brotes de tensión para que el Gobierno tome cartas en el asunto. Por ejemplo, la atención nacional se volcó hacia el municipio purépecha cuando bloqueó todas las salidas del pueblo con barricadas y hogueras para evitar la entrada del Instituto Electoral de Michoacán (IEM) como protesta ante las divisiones generadas por los partidos políticos. Cherán fue el único municipio del estado que no votó y esto marcó el inicio de un nuevo proceso electoral.
Sin duda, este es uno de los principales legados que el EZLN ha dejado en nuestra sociedad: después de siglos de exclusión se ha comenzado a valorar y a respetar la riqueza e idiosincrasia del mundo indígena que ha basado su convivencia en valores como la comunidad, la sustentabilidad y el trabajo.
Escrito para Caras de México por Jorge Chávez, Editor Senior en Mijo! Brands de México.
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